Una mujer conforme al corazón de Dios es la que deja de ser invisible ante lo que Dios ha hecho en ella.
Comprender quién te hizo y quién eres es crucial para que otras personas no tomen posesión de tu vida.
La fe, el amor, la humildad, la sabiduría, la obediencia a Dios y la búsqueda de su presencia es lo que identifica a una mujer conforme al corazón de Dios.
La mujer de fe mantiene su creencia en Dios y sus planes, aún en la adversidad.
Su pasado es testimonio de Dios, no vergüenza, y no afecta su presente ni futuro.
“Había allí una mujer que llevaba doce años sufriendo de flujos de sangre. Había gastado todo su dinero en médicos, pero ninguno la había podido sanar.” Lucas 8:43
Invisible Para Todos.
Debido a un flujo de sangre, la mujer era impura y aislada, invisible para la sociedad por años. Ella estaba en el anonimato para la sociedad.
En su desesperación, tras agotar todos sus recursos y ver que nada funcionaba, despertó en ella una fuerza interior. Fue la fe la que la impulsó a actuar y dirigirse hacia la solución, hacia la persona que la tenía.
¿Qué circunstancias te están impidiendo llegar y dejar de ser invisible?
Según el libro de Levítico, capítulo quince, una mujer durante su periodo debía apartarse y luego realizar un sacrificio a través del sacerdote para ser reintegrada a su sociedad y familia.
Nadie Se Da Cuenta De La Situación.
¿Nos podemos imaginar esta mujer como estaría no solamente físicamente sino emocionalmente?
Sola, en depresión, ansiedad, triste, cansada, sin fuerzas, avergonzada, con baja autoestima y sobre todo invisible.
Por eso esta mujer era invisible a la sociedad. Fue un dolor que duró más de lo que tenía que durar.
Quizás hoy experimentas un dolor prolongado y sabes que en tu interior persisten temores, dudas, e inseguridades. Has aprendido a vivir con ese dolor, incluso a ignorarlo, y nadie lo nota.
Por años buscamos a alguien que nos rescatara, que nos validara, que nos ayudara a salir de esa situación. Pero al final, solo logramos sentirnos aún más rotas y solas que antes de conocer a esa persona.
Esta mujer quería estar sana, pero buscó en lugares equivocados.
Cuando se está herido, roto, el peligro es que se busca con buenas intenciones en lugares o personas equivocadas.
Dios usa las dificultades para nuestro bien, esperando que reconozcamos nuestra necesidad de Él.
Quizás hoy pienses: ‘Mi vida o mi historia no son perfectas’, pero has tenido la determinación de acercarte a Dios desde el anonimato, desde ese lugar donde nadie te valoró, miró o tomó en cuenta.
Deja De Ser Invisible.
Muchas veces dejamos de testificar lo que Dios hace, esta mujer estaba lista a regresar a ser invisible, a pesar que recibió poder de Jesus.
“Entonces Jesús dijo: —¿Quién me acaba de tocar? Todos dijeron que nadie y Pedro le dijo: —Maestro, toda la gente a tu alrededor está empujándote y apretujándote. Sin embargo, Jesús insistió: —Alguien me tocó. Sentí que salió poder de mí. Cuando la mujer vio que no se podía esconder, se acercó a Jesús temblando y se arrodilló a sus pies. Todos la escucharon explicar por qué lo había tocado y cómo había sanado al instante.” Lucas 8:45-47
A menudo, Dios nos da una palabra, pero el miedo nos hace volver a nuestra antigua forma de vivir en lugar de avanzar.
¿Qué pasa cuando Dios nos da una palabra? nuestro territorio se ensancha. Significa que quien esté contigo tiene que crecer contigo y no estorbar con lo que Dios está haciendo en tu vida.
Tu crecimiento espiritual no se verá afectado por la mediocridad ajena, pues al ser tocada por el Señor, reconoces esa experiencia.
Lo Mejor Está Por Venir.
“Sé muy bien lo que tengo planeado para ustedes, dice el SEÑOR, son planes para su bienestar, no para su mal. Son planes de darles un futuro y una esperanza.” Jeremías 29:11
En Dios está tu verdadera identidad.
“Así que Dios creó al ser humano a su imagen y semejanza, creó al varón y a la mujer.” Génesis 1:27
Eres parte de una nación santa y un real sacerdocio.
“Pero ustedes son un pueblo elegido por Dios, sacerdotes al servicio del Rey, una nación santa, y un pueblo que pertenece a Dios. Él los eligió para que anuncien las poderosas obras de aquel que los llamó a salir de la oscuridad para entrar en su luz maravillosa.” 1 Pedro 2:9
Fuiste redimida por su sangre.
“La sangre que Cristo derramó en su muerte pagó el rescate para librarnos de la esclavitud. Es decir, que Dios es tan generoso que perdona nuestras faltas. Efesios 1:7
Que hay una estatura que tienes que alcanzar.
“hasta que todos lleguemos a estar unidos por la fe y el conocimiento del Hijo de Dios, y alcancemos la edad adulta, que corresponde a la plena madurez de Cristo.” Efesios 4:13
Date hoy la oportunidad de presentarte como Dios te ve, una mujer virtuosa.
Todas hoy en las reuniones y eventos de la congregación podrán estar cantando y aplaudiendo, pero solo unas pocas provocan sacar poder de nuestro Padre.
¿Serás tú una de ellas?
“Vengan a mí todos ustedes que están cansados de sus trabajos y cargas, y yo los haré descansar.” Mateo 11:28
Deja El Anonimato.
Descansa en Él, atrévete a creer que estás sana, y eres esa mujer conforme al corazón de Dios.
La fe en Dios llama a la manifestación. Recuerda que la fe prospera en la incomodidad. Deja el dolor y la vergüenza.
Tal vez la mayor de las mentiras cuando te enfrentas a tus batallas es que pienses que puedes pelear la batalla por ti misma, escondida a la vista de todos.
Siempre recuerda que la libertad se produce en la luz. Jesús es la Luz del mundo, y cuando obra con mayor poder, es cuando tú acudes a Él con tu fragilidad y tus heridas, y te pones bajo la luz de su gracia.
Pero Dios me ha contestado: «Mi amor es todo lo que necesitas. Mi poder se muestra en la debilidad.» Por eso, prefiero sentirme orgulloso de mi debilidad, para que el poder de Cristo se muestre en mí. 2 Corintios 12:9
Eres libre en Cristo desde el mismo instante en que pones tu confianza en Él.
Que tu vergüenza no te haga invisible. Dios ya tomó tu vergüenza y la llevó a la cruz.
Ya nada te acusa, el Señor no quiere que sigas invisible, quiere que resalte lo que Él ha puesto en ti. Deja de ser invisible.
En tu debilidad su poder se hace grande.
Ruego a Dios que le permitas hacer en ti lo que Él ya diseñó desde antes que llegarás a este mundo.
Si desea ponerse en contacto con nosotros, llene el formulario de Contacto o escríbanos un correo electrónico a: info@mensajesdepaz.com
