Toda persona quisiera evitar o retroceder ante la terrible experiencia de una tormenta de adversidad; pocas personas saben como enfrentar las tormentas de la vida.
Las tormentas son esos capítulos que todos queremos omitir en el trayecto a nuestro destino. Pero ciertamente para llegar a nuestro propósito algunas veces será indispensable enfrentarlas.
Atrévase a enfrentar esos momentos tormentosos, Dios está allí para recibirle en el centro de todas sus pruebas, para susurrar sus secretos que le harán salir con un rostro brillante y una fe indomable que hará temblar hasta el mismo reino de las tinieblas.
“Pero él sabe la clase de hombre que soy yo. Me ha puesto a prueba y saldré tan puro como el oro.” (Job 23:10,PDT)
El oro perece, y con todo es probado con fuego.
Si el oro perecedero es examinado con fuego para quitarle la escoria y estimar su autenticidad, ¿cuánto más necesita nuestra fe, que nunca perece, pasar por la prueba ardiente para quitarle todo lo defectuoso y probar su pleno valor?
El oro no aumenta por ser probado en el fuego, al contrario, se vuelve menos; pero la fe se afirma y multiplica por las tribulaciones y aflicciones.
El oro debe perecer al final y sólo puede comprar cosas perecederas, mientras la prueba de fe será hallada para alabanza, honra y gloria. Tal como lo dice el apóstol Pedro.
para que la prueba de vuestra fe, más preciosa que el oro que perece, aunque probado por fuego, sea hallada que resulta en alabanza, gloria y honor en la revelación de Jesucristo; (1Pe 1:7)
Todas las cosas ayudan a bien.
El Señor no aflige a nadie sin un propósito eterno.
“Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a su propósito.” (Rom 8:28)
Dios hace, opera e influye, de tal manera que todas las cosas ayuden para bien de los que le aman.
En su inmenso amor Él suele asignar pruebas agudas para mostrar el corazón de su pueblo y para producir en nosotros un carácter firme.
“El crisol es para la plata y el horno para el oro, pero el SEÑOR prueba los corazones.” (Pro 17:3)
Diversas Pruebas.
Toda prueba produce algo en nuestra vida.
El Señor no aflige a nadie sin un propósito eterno. Click To Tweet“Tened por sumo gozo, hermanos míos, el que os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia,” (Stg 1:2-3)
El apóstol Santiago no sugiere si quizá lleguen a pasar por diversas pruebas. Él da por sentado que vamos a tener pruebas pero que es posible sacar provecho de ellas.
La idea no es fingir ser feliz cuando uno se enfrenta al dolor sino tener una perspectiva positiva; tener “sumo gozo” por lo que las pruebas pueden producir en nuestra vida.
Santiago nos dice que debemos convertir nuestras dificultades en períodos de aprendizaje.
Como Enfrentar Las Tormentas.
debemos convertir nuestras dificultades en períodos de aprendizaje. Click To TweetLa fe es esa facultad dada por Dios que, cuando se ejerce, pone a la vista lo invisible, y provoca que las cosas imposibles se hagan posibles. Todo en el ámbito de lo sobrenatural.
La fe crece en medio de las tormentas es decir, donde hay disturbios en la atmósfera espiritual. Las tormentas son causadas por los conflictos de elementos; y las tormentas del mundo espiritual son conflictos con elementos hostiles.
Si el día de hoy está atravesando por alguna prueba muy intensa, si considera que su vida está en medio de una tormenta; tenga la seguridad que si ha puesto su confianza en Dios Él es fiel para librarlo.
Ingrese al ambiente sobrenatural de gozarse en medio de las tormentas de la dificultad. Como dice la Biblia, considérese muy dichoso.
Porque El Señor está obrando de una manera extraordinaria en su vida, y pronto verá el propósito por el cual atravesó ese camino tormentoso.
Su vida puede estar a una tormenta de alcanzar su destino. Siga adelante, no se detenga.
Recuerde que ahora en su barca está subido Jesús, a Él los vientos y las tormentas le obedecen.
Detrás de esa tormenta esta su propósito.
Siga depositando toda su confianza en el Señor, Él es fiel y conoce su necesidad.
Oramos a Dios para que su vida siga siendo fortalecida en Él.
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